Espectacular cambio de imagen en este convento del siglo XVI y que hasta hace bien poco lucía el blanco en sus paredes. Parece ser según los responsables de su restauración que este color estaba entre los encontrados después de el decapado a fondo de sus paredes asi como los dibujos geométricos que adornan ahora parte de su fachada y torre del campanario. Estos dibujos en forma de sillería nos recuerdan un poco a los realizados en la restauración de la catedral y como entonces tiene sus detractores y seguidores. Sin entrar en consideraciones sobre la ortodoxia del resultado final del trabajo es una gran noticia para nuestra ciudad esta obra de puesta en valor de un edificio en la zona más noble de nuestro patrimonio arquitectónico.
Me gusta el resultado!
ResponderEliminarDesde luego Mercedes, a mí también.
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