No veo nada claro el final de unas obras que se suponía iban a cambiar la fisonomía de nuestro río a su paso por nuestra Ciudad. Este faraónico proyecto pretendía cambiar, algo nada fácil, la visión y la aptitud de los badajocenses hacia su río y su aprovechamiento como lugar de ocio y esparcimiento. Acabadas las primeras fases de limpieza y tala de los árboles y matorrales que invadían la ribera derecha, siguieron grandes paradas biológicas y técnicas entrado en una fase de menos actividad. Solo el hornabeque del puente de Palmas, a pesar de las paradas, parece que se le ve un final próximo. Esperemos que la tan denostada crisis no eche a perder un proyecto que nuestra ciudad necesitaba urgentemente.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Fin de la historia
Pues si, todas las historias tienen un final y el de mi blog tambien. A finales del 2009 comencé esta andudura con un tema poco agradable y...

-
En la plaza de Santa María en el corazón de nuestro Barrio Alto y justo enfrente al Museo Luis de Morales, ha abierto sus puertas un local ...
-
Pues si, todas las historias tienen un final y el de mi blog tambien. A finales del 2009 comencé esta andudura con un tema poco agradable y...
-
La Escuela de Reactores se creó el 10 de diciembre de 1953, ubicándose en la Base Aérea de Talavera la Real. Al año siguiente se impartirí...
Ojalá!!!
ResponderEliminar